sábado, 31 de octubre de 2015

Horarios de Misa: Santos - Difuntos 2015

 
1 de Noviembre
Mañana:

Solemnidad de Todos los Santos

11:00 en Lugones
12:30 en Lugones
13:15 en Viella 

Tarde:

Conmemoración de los Fieles Difuntos
(en su víspera)

16:00 en el Cementerio de Lugones

17:00 en Viella (En la Iglesia)
+Media hora antes se rezará el Rosario retransmitido por megafonía en el cementerio
 

2 de Noviembre:

Conmemoración de los Fieles Difuntos


A las 18:00 en Viella
A las 19:30 en Lugones

viernes, 30 de octubre de 2015

Nota Informativa Cementerio Parroquial de Lugones 2015



MOVIMIENTO ECONÓMICO:

-SALDO a 01/11/2014: 6.056´07€
-INGRESOS por cuotas, servicios y colectas desde el 01/11/2014 al 31/10/2015: 20.867´75
Aunque sigue habiendo alguna gente que no paga, se aprecia, como en años anteriores, una genérica normalización y aumento de ingresos por pagos de cuotas, si bien, y también en número significativo, algunos sólo se ponen al día cuando se les exige por la Funeraria al ejercitar (por “necesidad”) el “Derecho de Uso” sobre los nichos. Se mantiene, igualmente, la genérica de años anteriores en lo ingresado por “servicios” (con un ligero aumento) y por colectas de funerales.

TOTAL INGRESOS: 26.923´82€
GASTOS:
-Por reparaciones y arreglos en zonas comunes (desconchados, cargas y pintura; desatasco de alcantarillas y recuperación y alicatado de nichos antiguos)  4.705´00€
-Por limpiezas y conservación ordinaria 1.650´00€
-Por reparación Cubierta completa Bloque “C” 3.175´00€
-Por reparación TOTAL Muro perimetral exterior (piedra rústica, carga, pintado y canalones) tal como anunciamos el año anterior 14.793´00€ (se han abonado ya 10.000€; se adeudan aún 4.793´00€)
TOTAL GASTOS: 19.530´00€
SALDO A 31/10/2015: 7.393´82€ El protocolo de recursos económicos sigue siendo el mismo:
A) -Cuotas y servicios
B) -Colectas de Funerales
C) -Aportaciones de la Parroquia
D) –Créditos (si hicieran falta)
Aunque a la fecha el saldo es positivo y ya estamos en situación de poder enfrentar lo adeudado, dado que el cementerio está prácticamente arreglado en su totalidad, también es cierto que sigue siendo de vital importancia para su mantenimiento y conservación seguir en la línea de responsabilidad en el pago de las cuotas (gracias a lo cual y entre todos, hemos hecho muchas cosas ya en estos años) para seguir teniendo atendidos como se merecen, en un lugar digno, a nuestros difuntos.
CUENTA CEMENTERIO (Banco Popular): 0075 0882 19 0600029256
RECORDAMOS que el impago de la cuota puede dar lugar a la revocación del título del “Derecho de Uso” (quien abandona la obligación que conlleva un derecho, abandona también el derecho) y, en todo caso, no se atenderá ningún “servicio”, ni por la Funeraria San Mateo (encargada del Cementerio) ni por la Parroquia, que no esté al corriente de pago. Igualmente, TODAS las obras que se realicen en los nichos o en su entorno han de contar con el PERMISO ESCRITO de la Parroquia, titular y única administradora del Cementerio y sus nichos, y, en caso de concesión del mismo, quedará condicionado al cumplimiento del criterio estético que recoge la normativa eclesiástica vigente y que se reseña al reverso de los “Títulos o Escrituras.”
-Funeraria San Mateo: (985 27 79 99) exigirá siempre para cualquier intervención en los nichos el Título (“Escritura”) del “Derecho de Uso” y los recibos de estar al corriente de pago de las anualidades del 2005 en adelante, así como el Permiso de Obras para intervenir.

ANTE CUALQUIER DUDA O ACLARACIÓN DIRIGIRSE A LA PARROQUIA: 985 26 04 14

Para cantar


ALGUNAS ACLARACIONES Y DUDAS SOBRE EL CEMENETRIO PARROQUIAL



1-¿Cuáles son los tipos de cementerios que existen principalmente?
Pueden ser de dos tipos principalmente: Municipales, cuyos titulares son los Ayuntamientos, y Parroquiales, cuyos titular es la Iglesia Católica por medio de las parroquias.

2-¿Quiénes son sus responsables y administradores?
En los Ayuntamientos el Negociado correspondiente de éstos y en los parroquiales el Párroco.

3-¿Están sujetos a la misma normativa los cementerios Municipales y los Parroquiales?
Ambos están sujetos a una normativa común (Policía Sanitaria Mortuoria) regulada por el Estado y las Comunidades Autónomas. A su vez los Municipales se regulan por una Ordenanza Municipal y los Parroquiales por la normativa específica de la Iglesia Católica para éstos.

4-¿Cómo se financia su mantenimiento y conservación?
Los Municipales por medio de los impuestos generales y específicos y los Parroquiales por medio de cuotas y recursos de la propia Parroquia .

5-¿Cuándo “compro unos nichos” puedo hacer lo que quiera con ellos?
No. “compré unos nichos” es una forma coloquial de hablar. Lo que “se compra” (lo que se enajena y por lo que se paga en su momento) es un “Derecho de Uso” sobre ellos no absoluto, sino regulado por la normativa específica del cementerio. El único “dueño” del cementerio (continente y contenido) es su titular (Parroquia o Ayuntamiento) los cuales enajenan (“venden”) unos derechos sobre los nichos. Los ayuntamientos, normalmente, en régimen de alquiler limitado; las parroquias, “Canonice et in perpetuum” (a perpetuidad canónica).

6-¿Qué significa perpetuidad canónica?
Que mientras se cumplan las normas de la Iglesia los nichos pasarán de generación en generación en la línea recta de la sangre y de primogénito a primogénito.

7-¿Puede enterrarse cualquiera en los nichos del cementerio parroquial?
No. En los nichos de un cementerio parroquial de la Diócesis de Oviedo sólo tienen derecho de enterramiento el propio adjudicatario/a, su cónyuge y sus hijos. Al fallecer éste, se transfiere el derecho sobre los nichos a su primogénito, y así sucesivamente mientras se cumpla la normativa eclesiástica.

8-¿Si un primogénito se lleva mal con alguno de los demás hermanos le puede impedir que se entierre en esos nichos?
No. Todos los hermanos hijos del mismo matrimonio del adjudicatario/a inicial  (sólo éstos; no sus esposas ni sus hijos) tienen derecho de enterramiento en ellos, aunque el nuevo titular pase a ser el primogénito. Con éste cambiará la generación y la transmisión del Derecho.

9-¿Qué ocurre si un adjudicatario o un primogénito de éste fallece sin descendencia?
Que los nichos pasan de nuevo a disposición de la Parroquia que decidirá sobre ellos.

10-Si un pariente (hermano, primo, tio, sobrino, cuñado…) aunque no sea sujeto de derecho estuviera interesado en los nichos del que muere sin descendencia, ¿habría alguna forma de acceder a ellos?
Si. Podría personarse y solicitarlo en función de su vinculación familiar, y la Parroquia, si lo considera y otras circunstancias no lo impiden, podría concedérselo como reclamante “colateral” mediante el abono de un canon que se establece según las circunstancias de cada caso y/ó proximidad parental.

11-¿Pueden “venderse” los nichos entre particulares?
No. Nadie puede vender lo que no es de su propiedad; sobre los nichos sólo se tiene un “Derecho de Uso”. La única propietaria es la Parroquia. Aunque hubiese un acuerdo, incluso un contrato firmado entre particulares en el que mediase precio, se podría estar cometiendo un ilícito penal de estafa. Cualquier transmisión de derechos sobre ellos ha de pasar por la administración parroquial y ser reconocido documentalmente por el Arzobispado de Oviedo.

12-¿Qué ocurre si ya no me interesan los nichos o ya no me hacen falta?
Puede renunciarse a ellos personándose en el Despacho Parroquial. También se podría solicitar la retrocesión del derecho sobre los mismos a la Parroquia, y si ésta estuviese interesada, podría compensar dicha retrocesión en función del tiempo transcurrido desde la primera adjudicación y del estado en que se encuentren los nichos, hasta un máximo de lo que se hubiese pagado en su día por el “Derecho de Uso” de los mismos.


Mons. Fidel Herráez Vegas ha sido nombrado arzobispo de Burgos



La Santa Sede ha hecho público a las 12.00 h. de hoy, viernes 30 de octubre, que el Papa Francisco ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la archidiócesis de Burgos presentada por Mons. Francisco Gil Hellín, conforme al canon 401, párrafo 1, del Código de Derecho Canónico. El Santo Padre ha nombrado nuevo arzobispo de esta diócesis a Mons. Fidel Herráez Vegas, obispo auxilar de Madrid desde 1996. Así ha sido comunicado por la Nunciatura Apostólica en España a la Conferencia Episcopal Española (CEE).

Mons. Herráez, obispo auxiliar de Madrid desde 1996

El arzobispo electo de Burgos nació en Ávila el 28 de julio de 1944. Realizó los estudios eclesiásticos en el Seminario de Madrid (1956-1968). Fue ordenado sacerdote el 19 de mayo de 1968. Es Bachiller en Teología por la Universidad Pontificia de Comillas (1968); Licenciado (1974) y Doctor (1977) en Teología Moral por la Universidad Pon-tificia Lateranense en Roma. Es autor de varias publicaciones sobre Teología Moral Fundamental.

En su ministerio sacerdotal desempeñó los siguientes cargos: formador, secretario y profesor de idiomas del Seminario Menor de Madrid (1968-1972); profesor de Teología Moral Fundamental en el Instituto Superior de Ciencias Religiosas y Catequética " San Dámaso" de Madrid y director de la Formación Permanente de las Hermandades del Trabajo de Madrid y Consiliario de jóvenes de las mismas (1977-1995); capellán de las Religiosas Irlandesas (Instituto de la B.V.María) (1977-1996); delegado diocesano de Enseñanza de Madrid (1979-1996); miembro asesor de la Comisión Episcopal de Enseñanza (1979-1995); secretario técnico de la diócesis de Madrid para las relaciones con la Comunidad Autónoma en los temas de Enseñanza Religiosa (1983-1995); presidente del Consejo diocesano de la Educación Católica (1986-1995) y representante de los Delegados diocesanos de Enseñanza en el Consejo General de la Educación Católica (1986-1995); presidente del Forum Europeo para la Enseñanza Religiosa Escolar (1992-1997); catedrático de Teología Moral Fundamental en la Facultad de Teología "San Dámaso" de Madrid (1993-1996) y Vicario General de la Archidiócesis de Madrid (1995-2015). Es Consiliario Nacional de la Asociación Católica de Propagandistas desde el año 2011.

El 14 de mayo de 1996 fue elegido obispo titular de Cedie y auxiliar de Madrid, recibiendo la ordenación Episcopal el 29 de junio del mismo año.

En la Conferencia Episcopal pertenece a la Comisión Episcopal de Enseñanza y Catequesis desde 1996.

Mons. Gil Hellín, arzobispo de Burgos desde 2002

Mons. Francisco Gil Hellín nació en La Ñora, Murcia, el 2 de julio de 1940. Realizó estudios de Filosofía y Teología en el seminario diocesano de Murcia (1957-1964). Recibió la ordenación sacerdotal el 21 de junio de 1964. Es licenciado en Sagrada Teología por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma (1966-1968) y en Teología Moral por la Pontificia Academia S. Alfonso de Roma (1969-1970). Es Doctor en Teología por la Universidad de Navarra (1975).

En la Santa Sede fue Subsecretario (1985-1996) y Secretario (1996-2002) del Pontificio Consejo para la Familia. Fue nombrado arzobispo de Burgos el 28 de marzo de 2002. Desde entonces es miembro del Comité de Presidencia del Pontificio Consejo para la Familia.

En la CEE es miembro de la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar desde el año 2002. También es miembro de la Comisión Permanente en representación de la Provincia Eclesiástica de Burgos desde 2011. Además fue miembro de la Comisión Episcopal del Clero de 2002 a 2005.

Carta semanal del Sr. Arzobispo de Oviedo


Réquiem de otoño
En el otoño del tardo octubre y del noviembre apenas apuntado, tenemos un gesto consonante con lo que la naturaleza nos dibuja en estos días. Los senderos de nuestros valles y montañas han vuelto a extender su mejor alfombra. Hojas ocres y amarillas se nos rinden a los pies para dejarnos deambular por ellas entre la magia de su encanto. En este tiempo se respira un aire calmo, de serena nostalgia, que un ambiente ceniciento y fresco nos recuerda el paisaje otoñal, cuando la vida se pinta con colores pastel, el alma se serena y escuchamos con gusto y compostura algún réquiem adecuado.

Quedan atrás las holganzas veraniegas, los sopores del estío, la aventura de principiar un curso que se abre con tantas cosas por estrenar. Casi sin darnos cuenta estamos ya en este tiempo malva que huele a crisantemo, a castañas asadas con nuestro mejor “amagüestu” asturiano, a lluvia que perfuma la tierra, y los primerizos copos blancos que revisten nuestras cumbres de inocencia. Esto nos trae este tiempo bendito y brumoso.

Mes de orar por nuestros difuntos y avivar así nuestra esperanza, sabiendo que la muerte sólo tiene esa breve palabra penúltima, porque como decía el poeta “morir sólo es morir, morir se acaba”, y luego viene la eternidad sin pausa. La que Cristo nos ha abierto con su resurrección. Aunque cuanto termina todo, tras una larga andadura o de modo abrupto tal vez, nos impone un letargo agostador casi siempre inesperado, casi siempre indeseado, pone presunto fin a lo que soñamos que no termine. Y de esto habla la liturgia exequial, que con inmensa delicadeza respeta el dolor debido, y nos abre con certeza a la esperanza.

Hay algo siempre ante la muerte que nos deja inquietos, como si fuera forzado el resistirse. Es una especie de rebelión la que sentimos en lo más hondo y más puro de nosotros mismos. El corazón nos impone de un modo fiero, cabal y terminante esta última verdad: no hemos nacido para la muerte. Y aunque desde que nacemos, desde que somos incluso concebidos, tenemos ya edad para morir, algo muy nuestro se nos pone en pie para decir que no, que no debería ser así. Pero es en esta santa rebeldía, que tiene más de oración que de blasfemia, cuando nuestro corazón se abraza a Dios y encuentra precisamente en Él al mayor mentor de nuestros anhelos más sinceros que nos bendice con el don de la paz en el alma.

No, no hemos nacido para la muerte. No nos engaña el corazón cuando nos demanda semejantes cosas, sino que viene a evidenciar una exigencia, una gran pregunta, que el mismo Dios humanado se hizo, porque el Dios humanado la hizo. La vida es maravillosa, es lo mejor que nos ha podido ocurrir. La vida como don recibido de Dios, como tarea que Él ha querido uncir a nuestras manos y a nuestra libertad, la vida como prolongación de tantas ansias incumplidas, tantos cantares compartidos, tantas esperas ensoñadas. Ahí está Él, el dador de todo bien, bendiciendo nuevamente con su bondad y embelleciendo con su hermosura, lo que de sus manos salió, porque la muerte sólo nos impone un hasta luego, un breve y fugaz adiós. Pero Cristo resucitado, vencedor de su muerte y de la nuestra, nos abrazará a nosotros y a cuantos hemos querido tanto, para nunca jamás separarnos, para adentrarnos en la casa de tantas moradas que nos quiso preparar. Este es el réquiem del otoño de la vida.

Mes de noviembre de colores cenicientos, de esperanza que enciende la luz en los ojos y llena el corazón de paz. Oremos por nuestros hermanos difuntos, y miremos el ejemplo que la Iglesia nos propone en los santos.


+ Fr. Jesús Sanz Montes, ofm
Arzobispo de Oviedo

jueves, 29 de octubre de 2015

Las reformas del Papa Francisco: el aborto



¿Qué dice sobre el aborto el Papa Francisco?

La Iglesia Católica se remite a Jesucristo, que es su origen, su fundador y su fundamento permanente. Él es el Logos encarnado. El Logos es la Razón y la Palabra. Y esa razón divina, que sostiene y potencia la razón humana, no nos exige nada que sea absurdo o irracional.

Jesucristo pide el cumplimiento de los mandamientos. A un hombre que le pregunta: “Maestro bueno, ¿qué he de hacer para heredar la vida eterna”, Él le responde. “Ya sabes los mandamientos” (Lc 18,18-20). El no que está al comienzo de alguno de los mandamientos – como el “no matarás” – equivale, en el fondo, a un gran sí; un sí a la vida.

El Evangelio es, ante todo, un sí: Un sí de Dios al hombre. Un sí a favor de la verdad, del amor, de la libertad y de la misericordia.

Cuando, siguiendo los mandamientos, la Iglesia previene sobre la maldad del aborto provocado, lo que hace es proclamar la verdad, pero sin usar la verdad como un arma arrojadiza, sino como un instrumento liberador (“la verdad os hará libres”, Jn 8,32) que busca el bien de todos: del niño que ha sido llamado a nacer, de sus padres y de la sociedad en su conjunto.

El Papa Francisco, al igual que todos los papas, ha sido muy claro en sus pronunciamientos sobre el aborto. En la exhortación apostólica Evangelii gaudium, pide a todos los católicos “cuidar la fragilidad” haciendo frente al vigente modelo “existista” y “privatista”, en el que “no parece tener sentido invertir para que los lentos, débiles o menos dotados puedan abrirse camino en la vida” (EG 209).

Entre los débiles, que la Iglesia quiere cuidar con predilección, “están también los niños por nacer, que son los más indefensos e inocentes de todos, a quienes hoy se les quiere negar su dignidad humana en orden a hacer con ellos lo que se quiera, quitándoles la vida y promoviendo legislaciones para que nadie pueda impedirlo” (EG213).

El Papa es consciente de que, muchas veces, se ridiculiza la defensa de la vida que hace la Iglesia, tachándola de ideológica, oscurantista y conservadora. “Sin embargo, esta defensa de la vida por nacer está íntimamente ligada a la defensa de cualquier derecho humano” (EG 213).

Por ello, el Papa advierte: “no debe esperarse que la Iglesia cambie su postura sobre esta cuestión. Quiero ser completamente honesto al respecto. Este no es un asunto sujeto a supuestas reformas o ‘modernizaciones’. No es progresista pretender resolver los problemas eliminando una vida humana” (EG 214).

Pero estas nítidas palabras son escritas en un contexto de empatía con las personas que “se encuentran en situaciones muy duras, donde el aborto se les presenta como una rápida solución a sus profundas angustias” (…) ¿Quién puede dejar de comprender esas situaciones de tanto dolor?” (EG 214).

En la encíclica Laudato si’, sobre el cuidado de la casa común, el Papa se refiere, en varias ocasiones, al aborto, encuadrándolo, asimismo, en la cultura del cuidado de lo frágil. En la naturaleza todo está relacionado y, por ello “tampoco es compatible la defensa de la naturaleza con la justificación del aborto. No parece factible un camino educativo para acoger a los seres débiles que nos rodean, que a veces son molestos o inoportunos, si no se protege a un embrión humano aunque su llegada sea causa de molestias y dificultades” (LS 120).

El aborto, un pecado mortal y un delito canónico

Según la doctrina católica, provocar directamente la muerte de un embrión humano es un grave atentado contra la ley de Dios. Si las personas que están directamente implicadas en un aborto son conscientes de lo que hacen, saben de la maldad de su acción y, aun así, la llevan a cabo con plena libertad, cometerían un pecado mortal.

Pero la Iglesia, además de recordar los mandamientos de la ley de Dios, tiene también sus propias normas. La Iglesia no es solo una realidad espiritual, sino que al mismo tiempo es una sociedad, una comunidad visible. Y, en consecuencia, posee su propio “código penal”.

Con el fin de disuadir a los católicos de la comisión de ciertos actos, entre ellos el de aborto, tipifica algunos pecados como delitos canónicos, que llevan aneja una pena o censura. Y así leemos en el c. 1398 del Código de Derecho Canónico: “Quien procura el aborto, si éste se produce, incurre en excomunión latae sententiae”; es decir, automática.

La pena de excomunión – en la que no incurriría el católico que fuese menor de edad o que no supiese que el aborto está tipificado como delito canónico – “tiene como fin hacer plenamente conscientes de la gravedad de un cierto pecado y favorecer, por tanto, una adecuada conversión y penitencia” (Juan Pablo II, Carta Encíclica Evangelium Vitae, n. 62).

De modo ordinario, la absolución del pecado de aborto está reservada al Obispo, al Vicario General, al Vicario Episcopal o al canónigo penitenciario.

El Año de la Misericordia


En una Carta (de 1-IX-2015) con la que se concede la indulgencia con ocasión del Jubileo extraordinario de la Misericordia, el Papa ha decidido ampliar, durante el Jubileo, a todos los sacerdotes la facultad de absolver del pecado de aborto, acercando de esta manera el perdón a quien lo necesite:

“El perdón de Dios no se puede negar a todo el que se haya arrepentido, sobre todo cuando con corazón sincero se acerca al Sacramento de la Confesión para obtener la reconciliación con el Padre. También por este motivo he decidido conceder a todos los sacerdotes para el Año jubilar, no obstante cualquier cuestión contraria, la facultad de absolver del pecado del aborto a quienes lo han practicado y arrepentidos de corazón piden por ello perdón”.



Guillermo Juan Morado.

La oración por los difuntos. Por Monseñor Atilano Rodríguez


La experiencia de la muerte de los amigos y familiares provoca siempre dolor y sufrimiento. A cada persona, la pérdida de un ser querido le trae a la mente los días pasados en su compañía, los sufrimientos compartidos, el cariño recibido y las alegrías vividas en común. Por ello, no deberíamos avergonzarnos nunca del dolor y de las lágrimas derramadas por nuestros difuntos. Son la mejor demostración del amor que les profesábamos y de la gratitud que les debemos.

Los grandes santos, como nosotros, experimentaron también el desgarro interior ante la muerte de los suyos. San Agustín nos dejó testimonio escrito del hondo dolor que le produjo la muerte de su querida madre. Dice el santo: “Mientras le cerraba sus ojos, una inmensa tristeza se espesaba en mi corazón y se transformaba en un río de lágrimas. Pero, ¿qué era lo que me dolía tan intensamente, sino la reciente herida abierta por la ruptura repentina de nuestra convivencia diaria, tan agradable y tan querida?”.

Este testimonio de San Agustín nos ayuda a comprender que el profundo dolor por la separación de nuestros seres queridos nos afecta a todos. Ahora bien, tanto el santo de Hipona como todos los cristianos, en virtud de nuestra fe en el Resucitado, podemos experimentar también la gran esperanza que se abre al ser humano con la muerte. En la vida y en la muerte, quienes creemos en Jesucristo, confiamos en el cumplimiento de aquellas palabras suyas: “El que cree en mí, aunque haya muerto vivirá, y todo el que vive y cree en mí, no morirá para siempre”.

La Iglesia, acogiendo con fe la Palabra de Dios y meditando en la victoria de Jesucristo sobre el pecado y la muerte en virtud de su resurrección, además de profesar en el Credo su profunda convicción en la resurrección de los muertos y en la vida del mundo futuro, no cesa de pedir a Dios, en la celebración de la Eucaristía y en otras oraciones litúrgicas, que se acuerde de su hijos, muertos con la esperanza de la resurrección, y que los lleve a contemplar la luz de su rostro por toda la eternidad.

Pero, además de estas oraciones diarias por los difuntos, la Iglesia, a partir del siglo XI, estableció la conmemoración de todos los fieles difuntos, el día 2 de noviembre. Con esta celebración, la Iglesia no sólo pretende expresar la profunda comunión existente entre los fieles difuntos y los que aún quedamos en este mundo, sino que anima a todos sus hijos a orar al Padre celestial por el descanso eterno de quienes nos han precedido en la fe. La participación en la vida de Cristo, celebrada el día del bautismo, tiene que llegar a su plenitud después de la muerte. Esta convicción, rechazada por quienes se apoyan únicamente en las demostraciones científicas, tiene pleno sentido para quienes confesamos nuestra fe en Jesucristo resucitado.

Con la confianza en nuestra propia resurrección, cuando el Señor quiera llamarnos a su presencia, oremos confiadamente por nuestros familiares y amigos difuntos. Pidamos especialmente por quienes mueren a causa del odio y de la violencia, o no tienen a nadie que ore por ellos. Que el Señor les conceda a todos el descanso eterno y los reciba en la región de la luz y de la paz, para que puedan contemplar cara a cara a su Salvador.

Con mi bendición, que el Señor acreciente nuestra fe en la vida eterna.

miércoles, 28 de octubre de 2015

28 de Octubre Fiesta de San Judas Tadeo



Oh glorioso Apóstol San Judas Tadeo, siervo fiel y amigo de Jesús, el nombre del traidor ha sido causa de que fueses olvidado de muchos, pero la Iglesia te honra y te invoca como patrón de las causas difíciles y desesperadas. Ruega por mí para que reciba yo los consuelos y el socorro del cielo en todas mis necesidades, tribulaciones y sufrimientos, particularmente (hágase la petición), y para que pueda yo bendecir a Dios en tu compañía y con los demás elegidos por toda la eternidad.

Yo te prometo, Apóstol bienaventurado, acordarme siempre de este gran favor; jamás dejaré de honrarte como a mi especial y poderoso protector y de hacer todo lo posible para propagar tu devoción. Así sea.

Jaculatoria. Glorioso Apóstol, San Judas Tadeo, por amor a Jesús y a María, escucha mi oración y protege a mi familia, y a cuantos con fervor te invocan.

Sobre el Sínodo de los Obispos


Todos los lunes a las 16:00 Encuentro de Vida Ascendente en los locales de la Parroquia

martes, 27 de octubre de 2015

Abierto el plazo de inscripción para la II Semana de Cine Espiritual en Asturias


(Iglesia de Asturias) Del 16 al 18 de noviembre tendrá lugar la II Semana de Cine Espiritual en Asturias, destinada a escolares de Bachillerato, ESO Educación Primaria e Infantil. Esta nueva edición de la Semana de Cine Espiritual podrá disfrutarse en Oviedo (Yelmo Cines Los Prados), en Gijón (Yelmo Cines La Calzada) y en Avilés (Centro de la Cultura).
Los colegios que deseen participar pueden inscribirse, hasta el 29 de octubre, en la página web www.cineespiritualasturias.es, donde encontrarán un formulario, así como información para la retirada de las guías con las que trabajar las películas previamente con los alumnos.
La II Semana de Cine Espiritual ofrecerá una película para adolescentes de ESO y Bachillerato (Trash), y dos para Educación Infantil y Primaria (La canción del mar y Meñique), seleccionadas por especialistas para trabajar los valores en clase.

A propósito del simposio de las reliquias de Oviedo


Con motivo del simposio que sobre las reliquias de la Catedral de Oviedo se celebró en esta ciudad los días 2 al 4, inclusive ambos, de septiembre de este año, se publicaron en los medios de comunicación, y sobre todo en la prensa, diversas informaciones que dieron lugar a lo que diríamos un cierto revuelo en la sociedad ovetense y a juicios y valoraciones negativos sobre el mismo simposio. En este sentido se expresó el mismo señor Arzobispo en su homilía de la fiesta de San Mateo. La verdad es que lo que se publicó da pie y sobradamente para ello. Pero ¿fue esto realmente el simposio? ¿Se trató en él de la autenticidad de las reliquias, en particular del Santo Sudario? ¿Se llegó a las conclusiones que se da por supuesto afirmó el simposio?

Digamos, para empezar, que del tema de la autenticidad de las reliquias, salvo una ponencia, la del profesor Andrea Nicolotti, ni directa ni indirectamente se ocupó nadie. La posición crítica de este estudioso es sobradamente conocida y fueron, precisamente o sobre todo, sus palabras en las entrevistas que los medios de comunicación le hicieron las que provocaron el revuelo. Sin embargo, en varias ocasiones él manifestó al que suscribe que su actitud frente a las reliquias y, en concreto, con respecto a la Sábana Santa de Turín y al Santo Sudario de Oviedo no era totalmente negativa y excluyente de toda posible autenticidad, sino más bien sanamente crítica, sobre todo frente a actitudes más fideístas que científicas de muchos defensores, y convencido de que hasta ahora no se han encontrado razones que convenzan de ella, sino más bien todo lo contrario, refiriéndose a las pruebas del carbono 14. La última de estas manifestaciones tuvo lugar por vía telefónica, apenas llegado a Turín, lamentándose de que la prensa le hubiera malinterpretado, haciéndole decir lo que él no había dicho, incluso a pesar de que, a petición suya, le habían pasado copia del texto que iba a ser publicado, algunas de cuyas enmiendas, según él, le fueron aceptadas, en tanto que otras, no.

La verdad es que, tal vez, más que hacerle decir lo que no había dicho, no dijo él exactamente lo que quería decir. Esto aparte, ¿qué hubo del simposio? Mi opinión personal es que, pese a su relativa modestia, de la que eran conscientes sus propios organizadores, quienes, precisamente por esto, quisieron llamarle simposio y no congreso, hizo aportaciones muy valiosas. Entre ellas, la ponencia del profesor Daniel Rico Camps, de la Universidad Autónoma de Barcelona, cuyo título fue "La inscripción latina del Arca Santa". Esta inscripción reviste extraordinario interés por cuanto es, si cabe, el contrapunto y confirmación del texto manuscrito de la llamada Donación de Langreo del rey Alfonso VI en el año 1075, a raíz de la apertura del Arca Santa, y sobre la que algunos formularon o siguen formulando radicales dudas de veracidad. Esta inscripción sufrió repetidos daños con el correr del tiempo y, sobre todo, en la malhadada Revolución de Octubre de 1934, que nos privó para siempre de la biblioteca y fondos de la Universidad, de los documentos multiseculares del rico archivo del Obispado y de la biblioteca del Seminario en Santo Domingo, con su Políglota Complutense, todo reducido a cenizas. Con la voladura de la Cámara Santa en tan fausta ocasión, el Arca Santa quedó rota y con ella, el texto escrito en su tapa. No se sabe si en este momento o si en otra circunstancia algún trocito de la plata del soporte se arrancó y fue luego erróneamente fijado en otra parte.

Sobre este texto, sus versiones y avatares, la conferencia del profesor Rico Camps ofreció un estudio exhaustivo y al día, de tal modo que todo el que en lo sucesivo diga algo sobre el tema habrá por fuerza de remitirse a él. Otro tanto cabría decir de la conferencia sobre las inscripciones en caracteres cúficos o árabes que adornan esta misma Arca y otras, de la que fue ponente la profesora María Antonia Martínez Núñez, de la Universidad de Málaga, y cuyo título fue "Las inscripciones islámicas del Arca Santa y de la arqueta del obispo Arias". Un estudio completísimo, con nueva versión personal de las fórmulas, que da sentido a los textos, cuando no faltó en el pasado quien dijera que se trataba de puros elementos decorativos.

Importante fue, asimismo, aunque en otro campo, la aportación por parte del profesor Patrick Henriet, de la École Pratique des Hautes Études de París, de un documento muy cercano a la apertura del Arca y contemporáneo del rey Alfonso VI. Se trata de una carta que escribe el obispo de Astorga Osmundo (1082-1096) a la condesa Ida de Boulogne, en respuesta a otra suya en la que le pedía información sobre el origen de ciertas reliquias que desde Astorga le había enviado, entre ellas cabellos de la Virgen María. La respuesta del obispo, remitiéndose a libros que obraban en su poder, es que habían sido traídas por mar, con otras muchas, de Jerusalén cuando amenazaba la persecución de los gentiles por los Siete Varones Apostólicos, nominalmente, por Torcuato e Isicio (Hexiquio), y que, ya en España, en el momento de la invasión de los árabes, habían sido llevadas por los obispos a Astorga y a Oviedo, da a entender que desde la corte (Toledo). De ser auténtica esta carta, extremo del que no dudaba el ponente, tenemos aquí una primera versión del origen hierosolimitano de las reliquias, que hasta ahora se conocía prácticamente sólo por el obispo don Pelayo y a quien considerábamos muchos como autor de la piadosa leyenda, creada a raíz de la apertura del Arca. El único documento sobre el particular que parecía independiente de la tradición pelagiana era la Crónica Silense, que habla de la entrada de las reliquias en Asturias por Gijón. Ahora ya disponemos de otro e incluso anterior. Con esto, en todo caso, la fama que tenía nuestro buen obispo don Pelayo de falsario no quedaría, precisamente, avalada por la leyenda del origen del Arca. Simplemente, la habría tomado del ambiente.

Aunque menos relevante, no deja de tener interés también la tesis mantenida por el profesor Eduardo Carrero Santamaría, de la Universidad Autónoma de Barcelona, sobre el origen y función primitiva de lo que hoy se llama Cámara Santa: según él, obra de Alfonso II, como tradicionalmente se creía, aunque no capilla en sus orígenes. Personalmente, nos parece interesante el que se defienda esta hipótesis, cuando son tantas y voces tan autorizadas las que sostienen que es obra de Alfonso III. Otra cosa es que se comparta la teoría del ponente sobre el destino primitivo del inmueble.

Por último, tal vez merezca la pena notar que, lejos del talante hipercrítico que se le otorgó a este simposio, don Francisco Javier Fernández Conde, en su ponencia sobre el documento de la apertura del Arca, se mostró más conservador y modificó algunas de las observaciones críticas que sobre él había formulado en otros escritos anteriores. En suma, pienso que el simposio, lejos de la caricatura que sobre él se pintó, fue todo un éxito y por ello no puedo menos que felicitar a sus organizadores, que fueron don Francisco Javier Fernández Conde y doña Raquel Alonso Álvarez, como a las entidades que lo hicieron posible con su financiación.

Enrique López Fernández
Canónigo de la Catedral de Oviedo

lunes, 26 de octubre de 2015

(Diario de Navarra) El Sínodo llama a “acompañar” a los divorciados para “discernir” cada caso


El papa Francisco ofició ayer la misa de clausura del Sínodo de los obispos sobre la familia. En su homilía aseguró que la clave para entender el texto es la “misericordia”. “A esto están llamados los discípulos de Jesús, a poner el hombre en contacto con la misericordia de Dios”, dijo en la misa celebrada junto con los cerca 270 padres sinodales. El documento, sometido a votación el sábado, ocupa 32 páginas y consta de 94 puntos, centrados principalmente en la  necesidad de una buena preparación al matrimonio, de la educación de los hijos en la fe y de la importancia de la fidelidad ante los peligros a los que se enfrentan los cónyuges en la sociedad.  El documento también aborda puntos más mediáticos, como los divorciados y la homosexualidad. Así, en el punto 84 se indica que los divorciados y vueltos a casar civilmente “tienen que ser más integrados en las comunidades cristianas”. Recuerda que “son bautizados, hermanos y hermanas, y su participación  puede expresarse en diversos servicios en la Iglesia”. S  re los casos en los que estas personas pueden comulgar,  el documento cita la exhortación Familiari Consortium, escrita en 1981 por san Juan Pablo II: “Sabemos los pastores que por amor  de la verdad están obligados a discernir bien cada situación.  Existe de hecho diferencia entre quienes se han esforzado por salvar el primer matrimonio y han  sido abandonados de manera enteramente injusta, de quienes por grave culpa han destruido un matrimonio canónicamente válido.  Están también quienes han contraído una segunda unión en vista de la educación de los hijos,  y a veces están subjetivamente seguros en su conciencia de que el anterior matrimonio no había  sido nunca válido”. Por ello el sínodo indica que “es tarea de los  presbíteros acompañar a las personas en el camino del discernimiento de acuerdo a las enseñanzas de la Iglesia”.  Respecto a las personas homosexuales, el Sínodo apunta que “no existe fundamento alguno para asimilar o establecer  analogías, ni siquiera remotas, entre las uniones homosexuales  y el diseño de Dios sobre el matrimonio y la familia”. Eso sí, el documento subraya que “cada persona,  independientemente de su propia tendencia sexual, tiene que ser respetada en su dignidad,  y acogida con respeto, con el cuidado de evitar cualquier marca de injusta discriminación”.   

(ABC) Diez razones para seguir manteniendo la asignatura de Religión en las aulas




1. Es un derecho Constitucional

Dos artículos de la Carta Magna avalan su enseñanza. El 27.2 dice que «La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana en el respeto a los principios democráticos de convivencia y a los derechos y libertades fundamentales». Y quienes tienen convicciones religiosas defienden que el hecho religioso es fundamental para ese pleno desarrollo. El artículo 27.3 afirma que «Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones». El derecho, por tanto, es de los padres, no de la Iglesia. Por eso es de oferta obligatoria pero de elección voluntaria.

2. Elección mayoritaria de los alumnos

Enlazando con el derecho de los padres, es importante no pasar por alto que un 65% de los alumnos en Secundaria eligieron la asignatura de Religión el curso pasado. En comunidades como Andalucía, según datos presentados en la reciente Asamblea de los Obispos del Sur, el 80% de los niños la cursaron voluntariamente en Primaria.

3. Ofrece una visión plural de la sociedad

La propuesta del Partido Socialista ha sido muy criticada por una parte significativa de los padres. «Es una absoluta falta de respeto hacia la libertad religiosa de los españoles, sea cual fuere su confesión religiosa», afirma la Confederación Católica Nacional de Padres de Familia y Padres de Alumnos en un comunicado. Para la Concapa, con esta medida, el PSOE pretende «imponer a todos los alumnos en el sistema educativo su propia ideología y una visión uniforme de la sociedad».

4. Previene contra la intolerancia

Expertos como Rafael Palomino, profesor titular de Derecho Eclesiástico en la Universidad Complutense de Madrid, advierten además de que la supresión de la Religión fomentaría la intolerancia. «No son pocos los instrumentos internacionales que entienden que un clima social de tolerancia pasa por una educación religiosa en la escuela. Su ausencia contribuye a la marginación del fenómeno religioso y fomenta los radicalismos, especialmente respecto de las religiones minoritarias», dice.

5. Evita la discriminación por razones económicas

Desde la perspectiva socioeconómica, no impartir Religión en la escuela supondría, asegura María Roca, catedrática de Derecho Eclesiástico en la Universidad Complutense, «una discriminación para quienes no tuviesen medios económicos para pagar las clases fuera de la escuela pública».

6. Mayoritaria en países de nuestro entorno

La mayoría de los países europeos (a excepción de Francia y Albania), detalla Rafael Palomino, «mantienen la enseñanza de la Religión en la escuela pública bajo una de las dos modalidades: enseñanza de religión confesional o enseñanza acerca de las religiones. Y de entre esa mayoría, son a su vez mayoritarios los países que mantienen la enseñanza de religión confesional».

7. Es parte de los acuerdos internacionales

Otro punto a tener en cuenta es el de los acuerdos con la Santa Sede, que «son tratados internacionales que prevén que se imparta la asignatura con el carácter de ordinaria. El incumplimiento de un pacto internacional es contrario al Derecho Internacional», recuerda María Roca. «Cuando estos acuerdos entran en vigor son también Derecho interno y España es un país serio. Además, no es un privilegio de la Iglesia Católica. También hay acuerdos desde 1992 con las confesiones islámica, judía y evangélica para que se atienda su formación religiosa», concluye.

8. Sin Religión, no se entiende Europa

Avelino Revilla, exdelegado de Enseñanza de la Diócesis de Madrid explica que «Europa no se entiende sin el Logos (la razón) griego, el Ius (derecho) romano y la tradición judeocristiana. Independiente de que se crea o no, hay que estudiarla; hay que saber lo que dice y por qué lo dice». Por eso defiende que sea evaluable. «Luis Gómez Llorente, histórico socialista–cita Revilla–, decía “lo que no se evalúa, se devalúa”. No hacerlo con la Religion sería un dislate pedagógico. En las aulas no se evalúa la fe, para eso está la catequesis, sino los conocimientos. Lo mismo ocurre con las doctrinas filosóficas. A Marx o a Kant se les puede creer o no, pero hay que estudiarlos y examinarse de ellos».

9. Esencial para entender nuestra cultura

La mayoría de las expresiones artísticas, literarias o musicales europeas tienen referencias religiosas. Sin la Religión, por ejemplo, es difícil entender a Bach. Profesores de Historia del Arte de diversas universidades españolas han expresado en otras ocasiones a ABC su «preocupación» por el creciente «analfabetismo religioso» de los estudiantes. Este «empobrecimiento cultural» les pasa factura, según apuntan, «a la hora de cursar estos estudios u otros relacionados con las humanidades».


10. Miles de puestos de trabajo

Y por último, pero no menos importante. La Federación de Sindicatos Independientes de Enseñanza, mayoritaria en la concertada, le avisa al PSOE de que su propuesta «pone en peligro miles de puestos de trabajo tanto en la enseñanza pública como en la concertada». Por ello, recuerdan a Pedro Sánchez las palabras del exministro Ángel Gabilondo: «Es indispensable el acuerdo para dar estabilidad económica, política y legislativa. Si no hay consenso educativo, no hay solución».

sábado, 24 de octubre de 2015

Necrológica Diocesana


Falleció en la mañana de hoy sábado 24 de octubre el sacerdote diocesano Rvdo. Sr. D. Amalio Bayón García

Nacido en Pajares (Lena) el 30 de noviembre de 1945

Tras cursar sus estudios de Filosofía y Teología en el Seminario Diocesano fue ordenado sacerdote el 15 de marzo de 1968 por Monseñor Viente Enrique y Tarancón. Coadjutor de San Esteban de Ciaño 1968 - 1969 y Capellán de la Residencia. Sanitaria de Cabueñes 1969 - 1970. Fue enviado a estudiar a Roma donde se especializa en Derecho Canónico y Teología Moral . De regreso a España pasa un tiempo en Madrid para licenciarse en Filosofía y Ética.

Sacerdote entregado a la docencia y al estudio, a lo que dedicó toda su vida; fue profesor en el Instituto femenino de Oviedo, Seminario Metropolitano de Oviedo y en el Centro de Estudios Diocesano de Ciencias Religiosas San Melchor de Quirós asi como en el IES de Ventanielles. Ejerció, así mismo, diversos cargos en la Curia arzobispal como juez del tribunal eclesiástico, Defensor del Vínculo y Vicario Judicial adjunto, entre otras encomiendas.

 Colaboró pastoralmente en la zona rural alta de Lena ayudando a su anterior Párroco Don Anselmo  (+ diciembre 2011) y en los últimos años ayudó en la medida de sus posibilidades a su compañero y amigo Don Jesús Fernandez ("Jomezana" + enero 2014) en las Parroquias de Hevia, Tiñana y Santa Marina (Siero).

Fue miembro del Consejo presbiteral por libre designación, capellán de la Comunidad de Dominicas de la Anunciata de la Casa Sacerdotal, así como Director de la misma hasta hace un mes en que cesó por su falta de salud.

El funeral será presidido por el Sr. Arzobispo en su Parroquia natal de San Miguel de Pajares este lunes día 26 a las 12:00 del mediodía, y a continuación recibirá en el cementerio parroquial cristiana sepultura.

"He combatido la buena batalla, he terminado la carrera, he guardado la fe"
                                                                                              (2 Tim 4,7).

Descanse en Paz

RECUERDA


Evangelio Domingo XXX del Tiempo Ordinario – Ciclo B


Lectura del santo Evangelio según San Marcos 10, 46-52

En aquel tiempo, al salir Jesús de Jericó con sus discípulos y bastante gente, el ciego Bartimeo (el hijo de Timeo) estaba sentado al borde del camino pidiendo limosa. Al oír que era Jesús Nazareno, empezó a gritar:
–Hijo de David, ten compasión de mí.
Muchos le regañaban para que se callara. Pero él gritaba más:
–Hijo de David, ten compasión de mí.
Jesús se detuvo y dijo:
–Llamadlo.
Llamaron al ciego diciéndole:
–Ánimo, levántate, que te llama.
Soltó el manto, dio un salto y se acercó a Jesús.
Jesús le dijo:
–¿Qué quieres que haga por ti?
El ciego le contestó:
–Maestro, que pueda ver.
Jesús le dijo:
–Anda, tu fe te ha curado.
Y al momento recobró la vista y lo seguía por el camino.

Palabra del Señor

viernes, 23 de octubre de 2015

Carta Semanal del Sr. Arzobispo de Oviedo



Concordia, premio a unos misioneros


Este año los Premios Princesa de Asturias de la Concordia, se ofrece a una orden religiosa muy querida y benemérita: La Orden Hospitalaria. Fue fundada por San Juan de Dios, ese testigo de la caridad hasta el extremo, que tocado en su corazón por Cristo no dejó de abrazar y cargar sobre sus hombros a los que Cristo tanto amaba: los pobres, los enfermos terminales, los desahuciados y despreciados por sus dolencias contagiosas.

Se repite con este santo lo que la larga historia cristiana no ha dejado de testimoniar: que Dios vuelve a recordarnos sus palabras y sus gestos, todo eso que tan fácilmente nosotros tendemos a olvidar o a traicionar, a través de un hombre o una mujer que sencillamente se dejan tocar por la gracia de Dios y consienten que en su corazón palpiten latidos de Evangelio. Así fue San Juan de Dios en su época.

Sus hermanos de hábito continúan en el tiempo esa misma pasión que él tuvo por los últimos. El galardón de esta prestigiosa Fundación asturiana que tiene como mentora a la Princesa de Asturias, recae esta vez en esta familia religiosa por haber visto en ella una expresión actual y urgente de la concordia que tanto nos hace falta en medio de un mundo enfrentado, que juega con las divisiones y las fronteras, que se enzarza en secesiones inútiles y oscuras, que se ensaña con nuevas formas de exclusión, de persecución y de holocaustos terroristas. La concordia no es un valor que abulte en nuestros días, por más que la gente de bien la desee con todas sus fuerzas.

Concordia significa precisamente eso: unir los corazones, latir al unísono, descubrir la belleza de la unidad y de la comunión verdaderas. Los hijos espirituales de San Juan de Dios han sido señalados y homenajeados precisamente por esta labor que realizan dentro de nuestra sociedad y en medio del mundo de esta generación humana.

Ha saltado la ocasión, que no pretexto, por el alto testimonio que algunos de ellos han dado con motivo de la enfermedad del ébola en África. Ese continente hermano ha vuelto a saltar a las noticias no por su belleza, no por sus recursos, no por la bondad sencilla de su gente sufrida y de tantos modos creyente, sino por la pandemia de turno que ahora se llama ébola como en otro momento se llamó sida.

Ya había segado muchas vidas el ébola, este virus letal. Pero no despertó ningún interés especial durante años, ni los laboratorios se unieron para atajar su mordiente mortal, hasta que su zarpa arañó fatalmente a europeos y americanos. Podrían contagiarnos, se decían los asustados del primer mundo opulento e insolidario: hagamos algo. Y lo hicieron, están en ello. Mucho me impresionó saber que la inmensa mayoría de los misioneros no hayan querido volver, permanecen allí siguiendo la suerte de su pueblo al que por amor a Dios fueron, y al que con amor de Dios no dejan de anunciarles la esperanza y la gracia, la dignidad y la justicia, el perdón y la alegría, en definitiva, la Buena Noticia cristiana. Era el momento de estar también con ellos.

Algunos de estos misioneros, contagiados por la enfermedad debido a la entrega hacia aquellos enfermos, llegaron a morir. Fue el precio que pagaron por el amor cristiano que ellos vivieron. No hay mayor expresión del amor: dar la vida, como nos enseñó Jesús, el Maestro. Y así lo aceptaron ellos testimoniando la concordia suprema, esa misma que Dios en su Hijo nos narró muriendo por nosotros. Mientras haya ejemplos así, la humanidad tiene motivos de esperanza. No todo es corrupción, ni insidia, ni secesión, ni terrorismo… queda la concordia de nuestros misioneros.

+ Fr. Jesús Sanz Montes, ofm
Arzobispo de Oviedo

Carta del Rey a la Orden de San Juan de Dios

Cuatro nuevos santos. Por el Cardenal Antonio Cañizares


El domingo pasado recibimos con inmenso gozo y alegría la canonización de cuatro santos: los padres de Santa Teresa del Niño Jesús, cuyo milagro se realizó a favor de una niña valenciana, la Madre María de la Purísima, de las Hijas de Santa Ángela de la Cruz, canonizada en un tiempo récord, y el sacerdote italiano Vicenzo Grossi, fundador del Instituto de las Hijas del oratorio. Muy significativa esta canonización porque se trata de la primera que se hace de un matrimonio, cuando tan urgentísimo es anunciar y presentar la belleza y la grandeza del matrimonio y de la familia; se trata de la canonización asimismo de una religiosa entregada por completo a la caridad con los más pobres, enfermos y desvalidos en el carisma suscitado por Dios a través de Santa Ángela de la Cruz, canonizada por San Juan Pablo II en el 2003,y un sacerdote que encarnó la vocación sacerdotal sirviendo como corresponde a los seguidores de Jesús, especialmente de los sacerdotes.

Todo un signo: exaltación del matrimonio cristiano, testimonio de caridad y pobreza en favor de los más pobres, y entrega completa al servicio de los demás en el sacerdocio, que tanto necesitamos. Una gran lección de Dios para los tiempos que corremos necesitados de la verdad, la grandeza y la belleza del matrimonio y de padres verdaderos educadores y transmisores de la fe a sus hijos hasta llegar a la santidad de sus hijos, una caridad heroica que hace el gran milagro de atender a los pobres más pobres, y el ejercicio de la vida sacerdotal en una entrega sin medida ni reserva alguna a favor de los fieles y de su evangelización.

Estas son las lecciones de Dios que necesitamos aprender. No son las ideologías las que salvan el mundo, sino sólo dirigir la mirada al Dios viviente, que es nuestro Creador, el garante de nuestra libertad, el garante de lo que es realmente bueno y auténtico. La revolución verdadera consiste únicamente en mirar a Dios, que es la medida de lo que es justo y, al mismo tiempo, es el amor eterno, y por ello mismo el amor, la caridad cristiana que se manifi esta en el amor del matrimonio, en la vida consagrada y entregada a los pobres, en el sacerdocio, cuya alma es la caridad pastoral. «Y ¿qué puede salvarnos si no el amor?» (Benedicto XVI, en Colonia, a los jóvenes).

Sólo Dios, sólo su amor y su misericordia. Ésos son los santos que han sido canonizados y, con ellos, de manera particular, los llamados y seguidores de Jesús, cuyo retrato que Él mismo nos dejó son las bienaventuranzas. Ellos, éstos son los santos de hoy que vivieron su vida mirando a Dios, poniendo en Él su mente y su corazón, teniéndolo en el centro más profundo de su existencia. Bienaventurados y dichosos para siempre, en la bella aventura que recorrieron en su vida, junto a Jesucristo y en comunión con Él, nos señalan que Dios es el único asunto central y defi nitivo para el hombre. Con razón, el papa Pablo VI defi nió el ateísmo como «el drama y el problema más grande de nuestro tiempo». Sin duda lo es.

El silencio de Dios, o el abandono de Dios, el ateísmo y la increencia como fenómeno cultural masivo, es con mucho el acontecimiento fundamental de estos tiempos de indigencia y de quiebra humana y moral en Occidente. No hay otro que se le puede comparar en radicalidad por lo vasto de sus consecuencias deshumanizadoras. Los santos, que han vivido LA REVOLUCIÓN VERDADERA CONSISTE EN MIRAR A DIOS, LA MEDIDA DE LO QUE ES JUSTO NO SON LAS IDEOLOGÍAS LAS QUE SALVAN EL MUNDO, SINO DIRIGIR LA MIRADA A DIOS y viven de Dios y para Dios, son quienes ahora nos marcan el camino para que se opere lo que Benedicto XVI ha denominado «la revolución de Dios», el paso a una humanidad nueva y renovada, donde reine en el amor y la paz, donde la verdad nos haga libres y misericordiosos, donde se siga el camino de la felicidad la que está, precisamente, en ese saberse creado y amado por Dios, en ese comprenderse hijo de Dios en todo, en ese camino paradójico de las bienaventuranzas, o si queremos de la felicidad que es el seguido por el mismo Jesús, y así son el autorretrato que Él nos dejó de sí mismo. Ése es el camino de la perfección, el que conduce hacia las cotas más altas de humanidad que son los santos, el camino de la verdad, el que cambia y renueva el mundo con la revolución del amor que es Dios y de Él viene. «El bienaventurado por excelencia es, en efecto, Jesús, sólo Él. Él es el verdadero pobre de espíritu, el que llora, el manso, el que tiene hambre y sed de justicia, el misericordioso, el puro de corazón, el artífi ce de paz; Él es el perseguido por causa de la justicia».

No busquemos otra ruta diferente a la de las Bienaventuranzas y la caridad que ponen a Dios en el centro, que señalan que viviendo en la confianza plena puesta en Dios –no en las riquezas, no en el poder, no en uno mismo y los propios intereses, no en las ideologías siempre parciales– es como se alcanza la felicidad que vivieron en la tierra y que ahora gozan en los cielos los santos. Es lo que vemos y palpamos en el mismo Jesús, del que somos discípulos. Demos gracias a Dios y alabemos la grandeza de su misericordia, que se ha manifestado en la santidad de los santos canonizados el domingo pasado.

ORACIÓN A SAN JUAN PABLO II




¡Oh San Juan Pablo, desde la ventana del Cielo dónanos tu bendición!

Bendice a la Iglesia, que tú has amado, servido, y guiado, animándola a caminar con coraje por los senderos del mundo para llevar a Jesús a todos y a todos a Jesús.

Bendice a los jóvenes, que han sido tu gran pasión. Concédeles volver a soñar, volver a mirar hacia lo alto para encontrar la luz, que ilumina los caminos de la vida en la tierra.

Bendice las familias, ¡bendice cada familia!

Tú advertiste el asalto de Satanás contra esta preciosa e indispensable chispita de Cielo, que Dios encendió sobre la tierra. San Juan Pablo, con tu oración protege las familias y cada vida que brota en la familia.

Ruega por el mundo entero, todavía marcado por tensiones, guerras e injusticias. Tú te opusiste a la guerra invocando el diálogo y sembrando el amor: ruega por nosotros, para que seamos incansables sembradores de paz.

Oh San Juan Pablo, desde la ventana del Cielo, donde te vemos junto a María, haz descender sobre todos nosotros la bendición de Dios. Amén.

Seguimos con el Plan Pastoral


miércoles, 21 de octubre de 2015

El PSOE quiere sacar a la Iglesia de la Constitución española



(El País) Las razones que los redactores de la Constitución de 1978 encontraron, después de un intenso debate, para mencionar a la Iglesia católica en la Norma Fundamental no son ahora asumibles por el PSOE. «Sin ir contra nadie, sin ofender a nadie, y garantizando el hecho religioso, vamos a avanzar, si tengo el honor de presidir el Gobierno, hacia instituciones laicas y pienso, por ejemplo, en la República francesa». El líder socialista hizo esta observación en Los Desayunos de TVE como apostilla al borrador de su programa electoral. En el apartado de laicidad el PSOE quiere solemnizar su determinación hacia el laicismo con lapropuesta de «eliminar la referencia a la Iglesia católica» en la Constitución.

Los constituyentes decidieron, con fuerte renuencia inicial del PSOE, hacer mención a la Iglesia católica para establecer la preeminencia de este credo, acorde con la cultura, la tradición y los sentimientos mayoritarios de los españoles. «Ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones». Así figura en el apartado 3 del artículo 16 de la Ley de Leyes.

Necesitan mayoría reforzada y referéndum

Aunque un hipotético Gobierno socialista tenga la determinación de llevar a cabo esa reforma se requerirá una mayoría reforzada de la Cámara y, después la aprobación en referéndum como es preceptivo cuando los cambios afectan a derechos. Los socialistas cuentan con esa consulta ciudadana para la modificación de la Constitución no solo en torno al título VIII, referido al Estado de las autonomías, sino para incluir nuevos derechos y, ahora, para suprimir algunos preceptos y menciones que, a su juicio, están superados por el paso del tiempo y el cambio de la sociedad.

El PSOE quiere mantener el apartado 1 del artículo 16 por el que se garantiza la libertad ideológica, religiosa y de culto de los individuos y las comunidades sin más limitación, en sus manifestaciones, que la necesaria para el mantenimiento del orden público». Nadie podrá ser obligado a declarar sobre su ideología, religión o creencias». Este apartado tampoco se tocará.

Denuncia de los acuerdos con la Santa Sede

Sí habrá nuevas apreciaciones sobre laicidad en las que trabaja el equipo de expertos constitucionalistas convocado por Pedro Sánchez. En principio, el candidato socialista irá más allá en este terreno que ningún otro líder del PSOE, según se constata en la lectura de sus programas. Entre las propuestas está «denunciar los Acuerdos de España con la Santa Sede».

Esta propuesta figuraba también en el programa electoral del anterior secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, de 2011, pero no se materializó porque los socialistas perdieron las elecciones. En los dos anteriores programas, en 2004 y 2008, encabezados por José Luis Rodríguez Zapatero, no se propuso alterar los acuerdos con el Vaticano. «La única promesa incumplida en este terreno ha sido la no presentación de la Ley de Libertad Religiosa a la que nos comprometimos en el programa de 2008 pero no llegamos a tiempo al terminar la legislatura antes de lo previsto», recuerda un redactor del equipo del programa actual que conoce todos los anteriores.

De nuevo se reaviva la promesa de elaborar esa ley y la denuncia o revisión de los acuerdos con la Santa Sede que tendrá consecuencias en numerosos campos. Esos acuerdos establecidos en 1979 afectan a la enseñanza, a la asistencia religiosa, a las Fuerzas Armadas y asuntos económicos y están sujetos a los procedimientos del derecho internacional y a los propios términos del tratado.

Otras propuesta es «la transformación de los lugares de culto en los centros públicos que impliquen internamiento como centros penitenciarios y hospitales en lugares de oración multiconfensionales». Este es un ejemplo para terminar con la «asimetría» a favor del credo católico. «De la misma manera que la libertad de conciencia y laicidad exigen tratar por igual las convicciones, el Estado no puede distinguir unas confesiones sobre otras», se lee en el programa socialista. «Se promoverán cementerios públicos no confesionales», añaden.

Elogio y reivindicación del hijo mayor (Rafaela está que muerde)



(De profesión Cura) Tengo una feligresa, una Rafaela cualquiera, que cada vez que escucha la última parte de la parábola del hijo pródigo se la llevan los demonios. Porque a ver, dice ella, ¿tan malo era el hijo mayor? Toda la vida fiel, trabajando por la casa común, obedeciendo al padre, y sin un solo detalle por parte de este, ni siquiera un ternero por una vez en la vida. Nada de nada. Pero cuando llega el hermano menor, después de haber dilapidado la herencia, todo son fiestas, alegrías y dispendios. Encima, para la historia y la exégesis, qué malo el hermano mayor. Y dentro de lo malo, al menos el menor, después de unos años de pecado y alejamiento, regresó arrepentido a la casa paterna. Menos mal.

Hoy muchos católicos se sienten como el hermano mayor y encima peor.Matrimonios abiertos a la vida, generosos, que llegaron al altar conservando su virgnidad, que rezan, trabajan, colaboran con su parroquia y a los que se tacha de integristas e inquisidores porque siguen creyendo en el matrimonio como siempre se hizo. Religiosas de vida contemplativa o activa, que llevan toda la vida intentando vivir de acuerdo con las reglas que profesaron, orantes, humildes, calladas, y hoy denostadas por no estar al parecer de algunos suficientemente al lado de los pobres.Sacerdotes -y no es mi caso- que se dejan la vida en la parroquia, que confiesan, celebran, atienden a los feligreses sin reservarse un minuto, rezan… y que pormuchos fieles e incluso superiores son tachados de conservadores, poco evangélicos y fieles seguidores del hermano mayor simplemente porque dicen que sí, que la Iglesia es para todos pero que habrá que convertirse…

Mal momento. El mundo al revés. Toda disidencia aplaudida. Todo error disculpado. Las acciones más abyectas merecen siempre una disculpa. Sin embargo la gente que pretende vivir como le han enseñado desde su infancia, que lee y estudia el catecismo, pregunta por los mandamientos y pide aclaraciones a lo que humildemente no comprende, lo único que viene sacando en limpio son bofetadas desde la propia Iglesia que les tacha de inmisericordes, fariseos, antievangélicosy reencarnación del hermano mayor de la parábola del hijo pródigo.

¿A quién no le va a agradar que regrese un pecador? ¿Quién no se encontrará feliz de que cualquier persona abandone su vida de pecado y se convierta a Cristo? Pero el problema es que parece que hay que sentirse feliz de que cada cual haga lo que quiera y el que no sea tolerante y comprensivo sea con lo que sea ya se sabe que el problema es que no quiere comprender el evangelio, se ata a la ley e impide el acercamiento de los demás.

Esta feligresa, que confiesa y comulga, va a misa, trata de formarse como buena cristiana y de educar a los suyos en la Iglesia, que sabe de pobres más de lo que muchos se imaginan, me dice que cuenta con los palos de la sociedad, pero con lo que no contaba era con palos desde la misma Iglesia por la que se siente tachada de inmisericorde, farisea, cerrada al evangelio y, sobre todo, de fiel reflejo del hijo mayor.

Como bien dice ella, los que somos llamados hijos mayores de la parábola, los de misa dominical, crucecita en el IRPF y ayuda económica, los que nos casamos por la Iglesia y ayudamos en Cáritas, teníamos que largarnos una temporada, a ver si ese padre, gracias al hijo menor y a sus geniales amistades, que por más carantoñas que reciban no van a volver, que lo sabemos, consigue llenar los templos y sacar la Iglesia adelante. Caramba, que ya está bien.

Jorge Glez. Guadalix

martes, 20 de octubre de 2015

«El Maligno se ha escondido, viene con amigos educados, convive en lo cotidiano y da instrucciones»


(Zenit) El Papa Francisco invitó al discernimiento y a la vigilancia, para no “interpretar mal a quien hace el bien, calumniar por envidia, tender trampas para hacer caer”, porque todo esto no viene de Dios sino del demonio. Así lo hizo durante su homilía de este viernes, en la misa que ha celebrado en Santa Marta.

Tal y como recordó, en el Evangelio del día Jesús expulsa un demonio, hace el bien, está entre la gente que lo escucha y reconoce su autoridad, pero hay quien no lo escucha.

Francisco explicó que “había un grupo de personas que no le querían y trataban siempre de interpretar las palabras de Jesús y también sus comportamientos, de forma distinta, contra Jesús”.

Y precisó: “Algunos por envidia, otros por rigidez doctrinal, otros porque tenían miedo que vinieran los romanos y les masacraran; por muchos motivos trataban de alejar la autoridad de Jesús del pueblo y también con la calumnia”. La calumnia como se ve en el Evangelio de hoy: "Si echa los demonios es por arte de Belzebú, el príncipe de los demonios". El Papa recordó que le ponían a prueba continuamente, “le ponían delante de una trampa para ver si caía”.

Por ello, el Pontífice invitó al discernimiento y a la vigilancia. “Saber discernir las situaciones”: es decir, lo que viene de Dios y lo que viene del maligno que siempre trata "de engañar”, “de hacernos elegir un camino equivocado”.

El cristiano --aseguró-- no puede estar tranquilo con que todo va bien, debe discernir las cosas y mirar bien de dónde vienen, y cuál es su raíz.

A propósito de la vigilancia, el Santo Padre advirtió que en un camino de fe “las tentaciones vuelven siempre, el mal espíritu no se cansa nunca”.

Cuando el demonio “ha sido expulsado” tiene “paciencia, espera para volver” y si lo dejas entrar se cae en una situación peor. De hecho, antes se sabía que era “el demonio que atormentaba”.

Después, “el Maligno se ha escondido, viene con sus amigos muy educados, llama a la puerta, pide permiso, entra y convive con el hombre, su vida cotidiana y, juega y juega, da las instrucciones”.

De este modo, Francisco recordó que con “esta modalidad educada” el diablo convence para “hacer las cosas con relativismo”, tranquilizando la conciencia.

Y lo explicó: “tranquilizar la conciencia. Anestesiar la conciencia. Y esto es un gran mal.Cuando el mal espíritu consigue anestesiar la conciencia, se puede hablar de una verdadera victoria suya, se convierte en propietario de esa conciencia".

El Papa advirtió que esto sucede por todas partes. “Sí, pero todos, todos tenemos problemas, todos somos pecadores, todos… Y en el ‘todos’ está el ‘ninguno’. Todos, pero yo no. Y así se vive esta mundanidad que es hija del mal espíritu”.

De este modo, y para concluir la homilía, el Obispo de Roma reiteró las dos palabras: vigilancia y discernimiento.

“Vigilancia. La Iglesia nos aconseja siempre el ejercicio del examen de conciencia: ¿qué ha sucedido hoy en mi corazón, hoy, por esto? ¿Ha venido este demonio educado con sus amigos conmigo? Discernimiento. ¿De dónde vienen los comentarios, las palabras, las enseñanzas, quién dice esto?” Discernir y vigilar --finalizó el Papa-- para no dejar entrar a quien engaña, seduce, encanta. Pidamos al Señor esta gracia, la gracia del discernimiento y la gracia de la vigilancia.

El TSJA anula el Decreto de la Consejería de Educación, en lo relativo a la asignatura de Religión, en Primero de Bachillerato


La Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Asturias ha dictado sentencia respecto de las dos demandas interpuestas por el Arzobispado de Oviedo, en relación a la impartición de la asignatura de Religión.
• En el caso de Primero de Bachillerato, el Tribunal anula el Decreto de la Consejería de Educación 43/2015, en lo que respecta a la asignatura de Religión, por considerar que existe “vulneración de Derechos Fundamentales a la igualdad y no discriminación”.
En lo referido a la situación de la asignatura de Religión en Segundo de Bachillerato, la sentencia indica que este asunto “se extralimita del procedimiento especial, debiendo canalizarse procesalmente tales cuestiones por la vía ordinaria”.
• En el caso del tratamiento de la asignatura en la Educación Secundaria Obligatoria, el Tribunal desestima el recurso al considerar que no se vulneran Derechos Fundamentales, puesto que existe la oferta y una asignatura alternativa, pero indica que lo que se demanda debe “canalizarse procesalmente por la vía ordinaria”.
El Arzobispado de Oviedo muestra su satisfacción por esta sentencia, porque de esta manera quedan garantizados los derechos que asisten a los alumnos y a los padres de familia a elegir la educación que quieran conforme a sus convicciones religiosas o morales.

domingo, 18 de octubre de 2015

“CADADA VEZ MÁS TU; CADA VEZ MÁS YO, SIN RASTRO DE NOSOTROS”


Recuerdo una canción de Joaquín Sabina en la que musicalizaba una letra que definía perfectamente el drama de la ruptura de una pareja de hoy en día. Decía algo así: El agua apaga el fuego y al ardor los años/Amor se llama el juego en el que un par de ciegos juegan a hacerse daño/ y cada vez más tú y cada vez más rotos/ y cada vez más tú y cada vez yo sin rastro de nosotros….

Sin juicios, porque cualquier ruptura siempre es un drama, se me ocurre también recodar y añadir las palabras del Ritual de Matrimonio: “Fulanito” (y después igual “Menganita”) ¿quieres contraer santo matrimonio con… y prometes serle fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, en la prosperidad y la adversidad, y así, amarle y respetarle todos los días de tu vida?.....Sí, quiero, contestan.

Pero resulta que ese “Sí” posterior, no siempre es así... Podría contar mil casos de frivolidades que llevan al fracaso matrimonial incluso antes ya de la celebración; incluso en el mismísimo viaje de novios, o, en no pocos casos, antes de cumplir un año de matrimonio. Existe (y el cura enseguida detecta en ocasiones) un “tufillo a muerto” (me refiero al matrimonio) a veces ya en los primeros encuentros con los novios, o al instruir el preceptivo expediente matrimonial. He llegado a proponer en alguna ocasión que “no se apuren; que son muy jóvenes aún; que hay tiempo…”

Lo cierto es que nuestra sociedad vive a galope entre las apetencias, ignorancias y mediocridades, y, sobre todo, egoísmos (que son la raíz de la frivolidad y superficialidad) y ello conduce, en no pocos casos, a la corruptela de “lo bello, lo bueno y lo perfecto” (que dirían los filósofos) de la vida en común de la pareja, por un “lo que a mí me da la gana”.

Insisto que tampoco quiero entrar en juicios ni generalizaciones, pues entiendo que cualquier separación conlleva, en cualquier caso, una dura carga de sufrimiento anterior y posterior  a la misma, y que, la Iglesia, sin dejar de hablar claro,  ha de ser al tiempo madre y bálsamo para esas heridas difíciles de cicatrizar, aún no teniendo en ocasiones ni apósitos ni pomadas.

Es terrible -ya lo hemos dicho más veces- tener que conjugar custodias compartidas de niños en el cate donde uno quiere que venga y el otro no; donde el odio que un día fue amor aflora en las miradas y en los silencios; donde un niño acobardado, levantando la mirada hacia el rostro de su madre, espera su gesto antes de contestar sí o no a la entusiasta propuesta de su padre…

Cuando sacamos a Dios de nuestras vidas, entra todo lo que no es Él, y Él, ante todo, es Amor. Amor para “sobrellevarse y perdonarse cuando alguno tenga quejas contra el otro” (Col.3). Pues al tiempo, también asistimos a bodas de “Plata y Oro” que son todo un ejemplo de convivencia y estímulo, y somos igualmente testigos de muchos matrimonios y parejas felices que sin exención de dificultades, se mantienen juntos y firmes en la riqueza y en la pobreza, en la salud y la enfermedad, en las alegrías y en las penas, lo cual nos certifica que la felicidad en el Amor es posible y, sin enjuiciar los fracasos de nadie, debemos rezar por una sociedad más buena, más bella y más perfecta, 

Joaquín, Párroco

sábado, 17 de octubre de 2015

Evangelio del Domingo XXIX del Tiempo Ordinario


Lectura del santo Evangelio según San Marcos 10, 35-45

En aquel tiempo [se acercaron a Jesús los hijos de Zebedeo, Santiago y Juan, y le dijeron:
–Maestro, queremos que hagas lo que te vamos a pedir.
Les preguntó:
–¿Qué queréis que haga por vosotros?
Contestaron:
–Concédenos sentarnos en tu gloria uno a tu derecha y otro a tu izquierda.
Jesús replicó:
–No sabéis lo que pedís, ¿sois capaces de beber el cáliz que yo he de beber, o de bautizaros con el bautismo con que yo me voy a bautizar?
Contestaron:
–Lo somos.
Jesús les dijo:
–El cáliz que yo voy a beber lo beberéis, y os bautizaréis con el bautismo con que yo me voy a bautizar, pero el sentarse a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mí concederlo; está ya reservado.
Los otros diez, al oír aquello, se indignaron contra Santiago y Juan.]
Jesús, reuniéndolos, les dijo: (en la fórmula abreviada: reuniendo a los Doce, les dijo:)
–Sabéis que los que son reconocidos como jefes de los pueblos los tiranizan, y que los grandes los oprimen. Vosotros nada de eso: el que quiera ser grande, sea vuestro servidor; y el que quiera ser primero, sea esclavo de todos. Porque el Hijo del Hombre no ha venido para que le sirvan, sino para servir y dar su vida en rescate por todos.

Palabra del Señor

Palabras del Santo Padre en la Catequesis de esta semana


viernes, 16 de octubre de 2015

La colecta del DOMUND es “la aportación de los pobres”


(OMP España) Anastasio Gil, director de Obras Misionales Pontificias (OMP) se refirió a “la universalidad y la solidaridad”, como dos notas características de esta Obra Pontificia cuyo único objetivo es ayudar a los 1.109 territorios de misión en el mundo. De hecho, la “hucha romana” donde las 140 Obras Misionales del mundo depositan anualmente los donativos recogidos, se denomina, precisamente, Fondo Universal de Solidaridad. El director de OMP en España destacó la importancia del “euro misionero”, ya que la fuerza de la recaudación de OMP está en la “aportación de los pobres”. De hecho,los 13 millones de euros del DOMUND 2014 (un 10% más que el año pasado), proceden fundamentalmente “de las parroquias, de los que participan en la Eucaristía dominical, de la suma de muchos pocos…” Esta especial forma de colaboración universal con la Iglesia, tiene su fundamento en la “limosna evangélica”. La gente se fía de OMP porque sabe que pone su dinero en las manos del Santo Padre, que es “quien conoce las necesidades” de la Iglesia en todo el mundo. En las Obras Misionales, no se trata de la ayuda de los países ricos del norte a los países pobres del sur, sino de la ayuda de todos entre sí. Como dato curioso, Anastasio Gil comentó que en 2014, Irán contribuyó al Fondo de Solidaridad de OMP, con 36 euros.

Las caras de la Misión: Carlos y Toñi

Carlos Gómez Vírseda, jesuita, misionero en Chad; y Antonia Valverde, “Toñi”, religiosa del Amor de Dios, misionera en Cuba, han puesto cara a la misión de la Iglesia.
Toñi explicó que su misión en Cuba consiste en “encarnar el amor misericordioso de Dios” entre los más necesitados y afirmó que “los que no tienen familia, son nuestra familia”. La religiosa reconoció que en estos nueve años que lleva como misionera en Cuba ha notado un “cambio para bien”, al que han contribuido las visitas de los últimos tres papas.
Por su parte, Carlos confesó que ha aprendido a ser “médico y maestro” mirando a Jesucristo. Aunque la práctica médica le desbordó al principio (el primer paciente que trató era un caso de malaria), descubrió pronto que si “curar” era algo que podía hacer sólo a veces, siempre podía “cuidar” a sus enfermos, aunque sólo fuera acompañándolos o cogiéndoles de la mano. El joven misionero resumió “el corazón” de su experiencia con un descubrimiento: “de la enfermedad al paciente, del paciente al hermano.” Como dice Carlos, si al principio era una enferma de Sida, luego era alguien con nombre y en un segundo momento de oración, un hermano, un hijo de Dios. El jesuita descubrió que “una vida larga o corta” no suma ni resta nada a la dignidad de ser hijo de Dios.

Finalmente, de cara al tan importante relevo generacional en los misioneros, que se está dando sobre todo en países que hasta hace poco recibían misioneros, Toñi destacó la importancia de trabajar con la Infancia misionera y Carlos lanzó un desafío a los jóvenes: “A los jóvenes nos falta valentía para salirnos de la fila y dar el paso”.